Carta en el cajón

Perdóname si muero joven. Realmente me gustaría existir toda la eternidad. En ti, contigo. Pero quizá eso nunca esté en mis manos, o puede que, lo estuviera y dejase escurrir demasiados minutos entre los dedos... Quizá no hice lo suficiente por quedarme a este (tu) lado... Sólo puedo alegar en mi defensa que viví al máximo. Agoté cada aliento, tuve sueños y muchas pesadillas, de las que siempre desperté. Cientos de miles de veces. Perdóname cuando, por una sola vez, no pueda hacerlo, sólo así descansaré en paz.

* Artista audiovisual y escritora. Parte de su obra se puede ver y leer en su blog.