24 horas en la vida de nadie

Hay noches que son lamento,
lamento de grito opaco,
de gemido seco,
de desuelo.

Hay noches que no son noches:
lamento desnudo solo.

Hay noches que son lejano
remoto dolor aullido,
de ausencia siempre,
de nunca.

Hay noches que no son noches:
son jamás.

Y hay noches que no son
lamentos lejanos aullidos secos ausentes.
Son noches difíciles.



Hay días que son blanco,
claridad mate sin huecos,
luz llana continua,
tenue superficie
rasa,
sin accidentes;
plano certero:
perfecto
blanco.

Hay días que son buenos,
buenos días,
buenas intenciones,
amable transcurso plácido del tiempo,
los mejores
deseos.

Y hay días que no son
sino malos días,
días que no son días
cuando esperan la noche.


Ausencia

Estuvieron bellas
las flores
sin ti y sin mí.

Fueron ellas,
claro,
las que no nos necesitaron.


Poeta pobre, viejo y feo

Vencido y convencido
de que mis ideas
eran para mí
ideales
solo,
mientras tanto
las hice añicos.

Entre los trozos convivo ahora revuelto
por el suelo.


Gravedad

A veces me veo desde tan alto
que cuando me despeño
me asombra comprobar
que no me he hecho tanto daño.


Retrato

Hay quienes –no muchos,
pero incluido yo mismo-
que dicen que urdo
representaciones ocasionales en un acto, que escribo
poemas.

Lo mismo que duermo o lato.

* Nacido en Águilas (Murcia) en 1958 en una familia de pescadores, es licenciado en Geografía e Historia por la Universidad de Murcia, periodista, escritor y orientador laboral. Ha ganado varios premios literarios, entre los que destaca el José María Valverde –de cuyo jurado formaron parte Rosa Regás, Manuel Vázquez Montalbán y José Agustín Goytisolo- y el Emilia Pardo Bazán. Investigador activo, trabaja con las posibilidades del lenguaje poético introduciendo elementos visuales, pictóricos, fotográficos y técnicas de diseño gráfico por ordenador. Dirige la revista Poe+ y el periódico Alteridad. Ha publicado Mi nombre es Nadie (Opera Prima, 2000). Blog. Poética: La poesía está en la vida; el resto son huellas, señales, cicatrices… poemas.