Nerón murió asesinado en mayo del 68

El saber de la tela es una fruta podrida o aliñada por brujas que tanto en la tela del cuadro nos impide la negritud (la tela tiene su dossier) como en la tela virtual nos impide la belleza de la memoria.

Lo pienso todo como pintor, así que equivoco las palabras, pero basta invertir el cuadro para comprender que no es abstracto, sino concreto, lo que pienso lo vivo, sólo que no está escrito en el escrito de la consciencia.

Un pensamiento para Georg Baselitz.

El saber de la tela es inconsciente, surge de la sombra, y no de la labrada luz de la vida consagrada a esos objetos sacramentales que son los libros.

De todas formas esas brujas que nos engañan en la apariencia son las hijas de las musas, y a la vez son más arcaicas que ellas, han salido a las abuelas. Podemos en toda confianza seguirlas en lo desconocido, cada día será distinto, especialmente si practicamos la pintura. Ellas harán arder nuestra torpeza con las revueltas del zorro y de la salamandra inventiva.

A veces sale más fácil despachar a Dios con un libro de autoayuda china yanquee que con la obra morosa de Santa Teresa. ¿Por qué no? El castillo interior del pensamiento positivo. Pero empieza a excavar en el patio del castillo, en el suelo de lo positivo, y encontrarás a todos los prodigiosos esqueletos que están en Dios, de huesos de jade y oro, de pellejos ventrales que han conocido la posteridad, un libro blanco de hinduismo con prefacio de Madeleine Biardeau, una serie de poemas de Lao Tsé, de Tchuang Tsé, o de Ucoc recitados por él mismo. Sutras diversos, el método Ruchpaul, el propio Octavio Paz, mejicano que vuelve de la tierra del ascetismo con las manos abiertas. Un catecismo maniqueo en Chino traducido por Nahal Tajadod, una trilogía monumental de un español, Ignacio Gómez de Liaño, que soporta sobre sus espaldas la invención y los repertorios de tanta sabiduría.

Soy parte del invento, no tengo más que pasar dentro, ¿qué hago fumando bajo la nieve?


* Manuel es pintor y escritor granadino residente en París (Francia). Puedes descargar gratuitamente su novela Pleroma aquí.