2 poemas

Se vende


750 centímetros cúbicos,

cuatro habitaciones.

Paredes y vasos seminuevos.

Interior, sin luz natural.

Húmedo y ruidoso.


Bien equipado.

Para entrar a vivir.


Nieves


Ejércitos de olivos boquean crucificados bajo el sol blanco.

Sus verdes filas se retuercen en la distancia,

rajando los campos hacia las torres moras,

donde el brillo de los espejos perla el atardecer cansado.


Un polvo de leche gotea sobre la aldea.

Dentro de las casas palpitan los braseros,

y el frío corre limpio y fresco por las calles,

lamiéndolas con la lengua del tiempo.


Nieves, siento que me esperas esta noche.

Ciegos pies me llevan a la fuente,

donde flota la luz de tu espectro.

El vapor de tus vestidos ondea lento,

y tu cabellera se mece bajo las oscuras aguas

de un cielo mudo y sin estrellas.


Te vuelves hacia mis pasos.

Tu mirada verde crepita sin verme,

errando lánguida por mi rostro,

y tu eterna sonrisa lee mi nombre,

soñando con días olvidados.